Los procesos industriales empezaron a surgir con la Segunda Revolución Industrial, en el siglo XVIII. Estos se encargan de convertir una materia prima en un bien o producto final. Y generalmente se destinan al consumo para un gran público objetivo. En este blog explicaremos en qué consiste exactamente y cuántos tipos existen. ¡No te lo pierdas! Además, si deseas ampliar tus conocimientos, puedes formarte con nuestro Curso en Sistemas HMI y Scada en Procesos Industriales.

¿Qué son los procesos industriales?

Los procesos industriales son una serie sistemática de operaciones mecánicas, físicas, eléctricas o químicas. Estos pasos ayudan a fabricar un artículo que se lleva, generalmente, a gran escala. Dicho de otra manera, se encargan de utilizar materia prima obtenida de distintos recursos naturales y emplearla para fabricar un producto en masa. Por ejemplo, la impresión de libros, la fabricación de aviones o barcos, la producción de bolígrafos, etc.

Cuando una empresa empieza a fabricar un producto, el proceso está determinado por ciertos factores. Por ejemplo, por la demanda del consumidor, la técnica de fabricación, los recursos de la empresa, etc.

Este tipo de procesos industriales son muy relevantes para la economía de toda la población. Pues, prácticamente el 90% de los bienes que se consideran imprescindibles en nuestro día a día, no existirían. Además, abaratan y hacen más asumible económicamente los bienes de consumo. En definitiva, permiten hacer más fácil la vida del consumidor final y simplifican los procesos de producción.

Tipos de procesos industriales

En la actualidad existen cuatro tipos de procesos industriales. A continuación, se resumirán brevemente cada uno de las diferentes operaciones para que conozcas en qué consisten:

Continuas

Las operaciones continuas se componen de líneas de producción dedicadas a producir el mismo artículo. Por lo tanto, su proceso de transformación se realiza durante un periodo de tiempo concreto y siempre de manera continuada. Es decir, trabaja las 24 horas del día y los 7 días de la semana, durante todo el año. Mediante este proceso, suelen fabricarse productos estándar de consumo diario como la pasta, el azúcar o el papel. Eso significa que en este caso la tecnología juega un papel muy importante. Pues, se utilizan, principalmente, en las industrias de la energía o química.

Por lotes

Este proceso es el más antiguo de todos. Pues, se lleva a cabo a través de una secuencia claramente definida. Su función principal consiste en mezclar la materia prima y posteriormente transformarla con unas condiciones y cantidades específicas, en una época concreta. Además, en estas operaciones, toda la producción se realiza paso a paso. Es decir, no se pasa de fase hasta que todos los productos no hayan finalizado la fase anterior. Un ejemplo podría ser la impresión de libros.

Discretas

Las operaciones discretas son aquellas que se realizan para crear un solo producto a la vez. Acostumbran ser productos de grandes dimensiones como vehículos o aviones. En este caso, se llevan a cabo varios procesos de transformación en un mismo lugar.

En masa

Este proceso es muy parecido al de flujo continuo. No obstante, este se organiza en torno a ciclos de producción y ciclos de descanso. Es decir, se realiza en un menor tiempo. Pero en cuanto a lo demás, sigue la línea de a mayor producción, menos costes y más abaratamiento del producto. Un ejemplo serían los bolígrafos.