La lavandería industrial es uno de los pocos negocios que ha permanecido abierto durante el estado de alarma debido a la pandemia por el covid-19. Y es que a pesar de las adversidades y una crisis sanitaria sin precedentes, son muchas las empresas del sector que se han visto obligadas a ajustar su servicio para adaptarlo a las nuevas exigencias. Sin duda, el sector está siendo una pieza clave en la lucha contra el virus SARS-Cov-2. Gracias a su labor, aproximadamente más de 25.000 kilos de ropa de hospitales y residencias son desinfectadas al día por fábrica.
Si bien, una lavandería industrial tiene como fin el lavado de prendas, el proceso que se realiza va mucho más allá de eso. Descúbrelo en este interesante post y recuerda que, si quieres especializarte como profesional del sector, en escuela ELBS puedes formarte con el Curso de Lavandería Industrial, una formación 100% online y a distancia, con tutor personal y certificación experto.
Lavandería industrial en tiempos de coronavirus
La higiene, la desinfección y las medidas preventivas se han vuelto más importantes que nunca y cobran una mayor relevancia en la lucha contra patógenos como el SARS-Cov-2. Según algunos estudios, el virus puede vivir en diferentes superficies (ej. ropa laboral) por horas. Por ello, muchas empresas de servicios de lavandería industrial han intensificado sus lavados y extremado los protocolos de higiene y limpieza. La gestión del vestuario se reduce a industrias esenciales como la socio-sanitaria, la farmacéutica, la agro-alimentaria y la de gestión de residuos, las cuales tienen un mayor nivel de exposición al virus.
Los servicios de lavandería industrial han sido fundamentales en la lucha contra la pandemia y sus efectos. Veamos qué medidas o planes de contingencia han adoptado en sus instalaciones:
- Adaptar los turnos de trabajo para reducir la coincidencia de personal en las plantas de trabajo
- Dotar de elementos de protección a todos los recursos humanos
- Re-estructuración de los procesos y las instalaciones para garantizar la distancia de seguridad en todos los espacios
- Implementar medidas higiénicas exigentes y adaptadas a la situación de excepcionalidad
- Incrementar las temperaturas en el lavado y garantizar la desinfección integral contra el SARS-Cov-2
¿Cómo es el proceso de lavado?
- Recopilación de las prendas
En primer lugar, los técnicos realizan la recogida de las prendas y el vestuario laboral del cliente en sus instalaciones. Allí se procede a pesar el monto de ropa y se traslada a la lavandería industrial donde se pesa nuevamente. Todo ello, siguiendo los protocolos de seguridad y limpieza establecidos.
- Clasificación
La clasificación de las prendas se realizará de acuerdo a sus necesidades y requerimientos. Estos pueden ser: manchas, colores, productos, materiales etc.
- Lavado
En este punto, todas las prendas son puestas en la máquina de lavado correspondiente con el modo apropiado. En el estado de alarma, de acuerdo con las nuevas especificaciones, las lavanderías incluyen procesos virucidas. También se ha aumentado la temperatura superando los 90º y la carga por kilo de ropa, dando lugar a una desinfección vírica completa.
- Secado
El tiempo de secado y la temperatura del mismo van a depender del tipo de textiles. Por otra parte, se garantiza que la prenda esté totalmente limpia previo proceso de control de calidad.
- Planchado
El planchado industrial generará el acabado final de la prenda. Es un aspecto clave para que el cliente denote limpieza y seguridad a la hora de recibir sus prendas.
- Empaquetado
El proceso de empaquetado determina el éxito del lavado. Este se clasificará y embalará con responsabilidad para que no exista contaminación de la ropa limpia.
- Entrega y transporte
Tras todo este ciclo, se entregan el vestuario laboral totalmente desinfectado a cada trabajador. Qué sólo tendrá que recogerlo embolsado herméticamente en su taquilla, antes de empezar su jornada.