Contribuir con el urbanismo sostenible se ha convertido en uno de los retos más importantes planteados en la actualidad. En este blog explicaremos cuáles son sus características principales, así como sus objetivos y principios. ¡Sigue leyendo para no perdértelo! Además, si te interesa este sector, puedes ampliar tus conocimientos y especializarte con nuestros Cursos y Másteres en Ambiental. ¡Solicita ahora más información!

¿En qué consiste el urbanismo sostenible?

El urbanismo sostenible consiste en planificar y diseñar las ciudades teniendo en cuenta principios ecológicos. También proporciona recursos urbanísticos suficientes dándole valor al medio ambiente. Por lo tanto, contribuye al progreso sin olvidarse de los requerimientos y la triple dimensión económica, ambiental y social de la sostenibilidad.

Además, para crear ciudades más sostenibles y habitables se hace preciso conjugar una serie de factores diversos. Por ejemplo, las formas con el agua y la eficiencia energética, la calidad de vida a sus habitantes sin poner en riesgo los recursos, la prestación de servicio, la cohesión social, etc.

Por lo tanto, el desarrollo urbano sostenible, al igual que otras tendencias de planificación urbana, vela para que los ciudadanos dispongan te todas las comodidades indispensables a una comunidad. Estas incluyen energía eléctrica, agua, transporte y vías.

De esta manera, las ciudades con este tipo de diseño pueden reducir su impacto en el medio ambiente. Y esto se consigue a través de la eficiencia energética, gestión de residuos o creación de zonas verdes. Y, asimismo, mediante estrategias para reducir las distancias entre traslados y fomentar el transporte público.

¿Cuáles son los objetivos del urbanismo sostenible?

El objetivo del urbanismo sostenible o desarrollo urbano sostenible es generar un entorno urbano que no atente contra el medio ambiente. Y a su vez, crear un espacio cómodo, planificado y agradable, tanto para sus residentes actuales como también para futuras generaciones. Es decir, tiene como finalidad proporcionar recursos urbanísticos suficientes en cuanto a las formas y la eficiencia energética y del agua. Y también busca aportar funcionalidad para convertir lugares mejores para vivir.

La superpoblación del plantea, el consumo desmedido, la escasez de recursos naturales como la energía y el agua, la contaminación, entre otros factores, han impulsado la aparición de las conocidas ciudades sostenibles. Por lo tanto, para calificarlas, estas deben respetar y cumplir los siguientes principios:

Medioambientales

La sostenibilidad medioambiental tiene varios aspectos en cuenta. Por ejemplo, las edificaciones deben provocar el menor impacto en el medio, consumiendo la menor cantidad de recursos y energía posibles y reduciendo la emisión de residuos.

Económicos

La sostenibilidad económica consiste en crear proyectos económicamente viables, para evitar invertir en más recursos de los necesarios. Cualquier proyecto debe ser planificado sobre la base de una construcción costo-eficiente. Y, además, se intenta que los clientes consiguen ahorrar costos en comparación a proyectos tradicionales.

Sociales

La sostenibilidad social trata de atender a las necesidades demandadas por el entorno. Es decir, de los residentes y su entorno. Esto se consigue mediante una mejora en la calidad de vida de la población y asegurando la participación ciudadana en el diseño del proyecto, de manera directa.